jueves, 23 de junio de 2016

¿Qué hacer en verano (5)?

La depresión

Hoy vamos a tocar un asunto duro y difícil, como siempre, creo que lo mejor es siempre ir a un especialista y no hay que sentirse mal por ello, cuando nos duele una pierna vamos al fisio o al médico, si nuestra cabeza duele vamos a un médico especializado, un psiquiatra o un psicólogo y no debemos sentirnos mal por ello, es lo más natural

Dicho esto, hemos visto ya todos los puntos que me habían planteado estas últimas semanas, repasemos:
  1. Hablas sobre cambiar las rutinas, ¿cómo es posible?
  2. No es tan fácil organizarse, ¿qué me recomiendas?
  3. ¿Cómo conciliar vida, trabajo, estudios, ocio y empredimiento?
  4. ¿Es realmente posible tratarse problemas de autoestima por uno mismo?
  5. ¿Qué hago sino tengo fuerzas para levantarme de la cama?
No es fácil darse cuenta de que estamos mal, nos planteamos que todo está bien, nos ponemos una máscara y salimos de casa, hacemos nuestra vida, cumplimos nuestras obligaciones e incluso podemos vivir o sentir felicidad, no es incompatible, pero cuando volvemos a casa los monstruos de nuestra cabeza despiertan...

Tal vez tú no lo notes, pero lo que están a tu lado te verán cambiar de actitud fácilmente, tan pronto estás feliz como te enfadas o te entristeces, no sabes lidiar con lo que pasa. No sólo eso, tu cabeza está revuelta, no hilas bien las ideas, te confundes en las tareas más sencillas como si estuvieras distraído todo el tiempo.

Aunque lo más difícil siempre es la convivencia en tu casa, con tu pareja o con tu familia, los quieres, pero sientes que no te entienden, los alejas, montas escándalos que en el fondo de tu alma sabes que no montarías normalmente, y sí, pasado el enfado te disculpas, pero vuelve a pasar. Te enfadas y te peleas porque nadie te entiende, y no es cierto, quieren ayudarte, pero necesitas dejar que te ayuden, ser valiente y escuchar cosas que no te gustan, si te llevan al psicólogo, al médico especializado, es para que mejores, lo mismo que harían si te desmayas o te rompieras una pierna.

¿Se puede controlar? No siempre, no habitualmente, y del mismo modo que una herida infectada puede derivar en septicemia o grangena, un mal no tratado puede devenir crónico, y aquel problema que con un poco de terapia y unos relajantes para controlar las subidas y bajadas súbitas de ánimo se calmaría y superaría puede derivar en algo mucho peor. 


No tengas miedo ni dudas, tu familia que te quiere te ayuda.

Hemos hablado del peor tipo de depresión, una llegada a mucho. Si sientes síntomas y ves que no puedes controlarlos, anticípate, pero si ves que puedes controlarlos unos consejos. Aún así, si te sientes mal y no ves poder solucionarlo acude a tu médico de cabecera, te ayudará. 

  1. Tu familia te adora y te quiere, sé positivo con ellos, trátalos con amor, te irá mejor, serán tu apoyo.
  2. No te quedes mirando la tele, eso no ayuda nunca, lee un libro, haz ejercicio, escribe un diario, tus memorias, una novela, es una gran terapia, y quien sabe, alomejor sale un best-seller
  3. Haz actividades placenteras, cocina en tu casa, sal al parque con tus hijos, visita los museos, ve al cine. Y si hay poco dinero, aprovecha días del espectador, domingos gratuitos.
  4. Ve a la playa, a la montaña, a piscinas públicas, mantén tu cuerpo ocupado.
  5. Estarás algo distraído en tu vida diaria, haz un esfuerzo y presta atención a lo que haces.
Y si aún así no te sientes mejor, acude a un especialista, te arreglará.

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